La trayectoria artística del llamado Acuarelista de la poesía antillana, Luis Carbonell (1923-2014), ícono cultural cubano, será evocada en la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac).
En la sede de la Uneac en La Habana, el legado de Carbonell a un siglo de su natalicio, será centro de un panel integrado por el Presidente de Honor de la organización, Miguel Barnet, el vicetitular Pedro de la Hoz y el presidente de la Fundación Nicolás Guillén, Nicolás Hernández Guillén, según anunciaron los organizadores del encuentro.
Una nota de esa institución señala que con motivo del centenario del relevante artista nacido en Santiago de Cuba, a celebrarse el próximo 26 de julio, se organizan en todo el país las actividades de celebración a la fecunda vida y obra del Acuarelista de la poesía antillana.
En la recién clausurada Fiesta del fuego, acontecida en la ciudad natal de Carbonell, se dedicó gran espacio a reconocer sus valores artísticos, sus dotes de narrador oral y su carismática personalidad, la cual caló hondo en el gusto del público cubano.
Barnet, presidente de honor de la Uneac, lo definió como la cúspide de la narración oral, la expresión de las alegrías más profundas del alma colectiva, la satisfacción de los apetitos cotidianos, donde no solo la alegría sino la reflexión tienen su más recóndito asidero.
Con la remembranza de su obra y aportes a la cultura nacional, intelectuales cubanos brindan su homenaje a Luis Mariano Carbonell, a propósito de cumplirse el centenario de su natalicio en Santiago de Cuba este 26 de julio. Sirva este tributo también para recordar su gesto preciso y memoria secular.»Y es que la memoria de la poesía se convertía en su voz en poesía de la memoria, viva, serpenteante…Caballero y duende, señor y güije, hablador y reflexivo, rumba y sinfonía, masa coral y música de cámara, cubano y universal.»