La compañía estadounidense American Airlines es muy optimista con respecto al futuro de sus vínculos con Cuba, según aseguró en La Habana su gerente de operaciones en la Isla, Ramón Jiménez.
La empresa, la de mayor número de vuelos entre Estados Unidos y Cuba, opera en este país desde hace 26 años y desde hace tres con vuelos regulares, lo que facilita a los viajeros mayor conectividad.
En un encuentro de la Asociación Internacional del Transporte Aéreo, Jiménez, citado por la agencia Prensa Latina, señaló que American Airlines tiene una estrategia a largo plazo para expandir sus vuelos hacia la Isla.
Actualmente, la firma vuela a seis ciudades del archipiélago caribeño: La Habana, Varadero, Santa Clara, Camagüey, Holguín y Santiago de Cuba, y en julio prevé comenzar el sexto vuelo diario entre La Habana y Miami.
Sobre eventuales afectaciones a la compañía de la decisión del Gobierno estadounidense de activar el Título III de la Ley Helms-Burton, el ejecutivo apuntó que el asunto está en estudio.
La regulación permite a ciudadanos estadounidenses entablar demandas contra empresas cubanas o extranjeras que inviertan en propiedades nacionalizadas tras el triunfo de la Revolución en enero de 1959.
No podemos emitir un juicio sobre algo que no conocemos específicamente, aunque “en estos momentos nuestro enfoque es apostar al mercado cubano a largo plazo y continuar nuestras operaciones aquí”, indicó Jiménez.