El balneario cubano de Varadero dedica el obligado período de inactividad turística que vive hoy para renovarse y recibir a sus visitantes con mejor cara y servicios cuando quede atrás la pandemia de covid-19.
Diversas inversiones se ejecutan en el principal polo de sol y playa de la isla, varias de las cuales están muy relacionadas con la XL Feria Internacional de Turismo FITCuba 2020, que estaba prevista del 4 al nueve de mayo y debió ser pospuesta por la amenaza del SARS-CoV-2.
En el Centro de Convenciones Plaza América se trabaja en una renovación de sus áreas, entre las que destaca la construcción de nuevos viales, zona de parqueo, colocación de falsos techos, luminarias y sistemas de aire acondicionado.
Actualmente se labora también en la reanimación del Parque Josone, la Casa Perla y el Hotel Cuatro Palmas, así como en la construcción de un boulevard entre las calles 62 y 64, señaló a la Agencia Cubana de Noticias el subdelegado del Ministerio de Turismo en la provincia de Matanzas, Luis Martínez de Armas.
El funcionario apuntó que en la Península de Hicacos se desarrolla asimismo un amplio proceso de mantenimiento constructivo en instalaciones hoteleras y extrahoteleras, y aseguró que la covid-19 va a reafirmar a Cuba como un destino seguro para el turismo mundial.
La segunda mejor playa del mundo según votación de internautas en el sitio digital TripAdvisor también se beneficia en estos días con vertimientos de arena, que mejorarán considerablemente las condiciones en el balneario.
Ubicado a unos 140 kilómetros al este de La Habana, Varadero cuenta con más de 20 kilómetros de playa y una franja de baño de unos 30 metros.
Hoy dispone de casi medio centenar de instalaciones hoteleras, con más de 22 mil habitaciones, la gran mayoría de cuatro y cinco estrellas.
Más del 80 % de la planta habitacional es operada mediante contratos de administración y comercialización por cadenas hoteleras extranjeras.