Inquietos, llenos de energía, pero vulnerables, la protección de los niños debe ser uno de los empeños principales en medio de la crisis sanitaria mundial provocada por la expansión de la covid-19.
Para intentar compensar la necesaria permanencia en casa de los menores de edad, en Cuba se han tomado medidas y puesto en práctica iniciativas para llenar su tiempo libre con entretenimiento y actividades educativas.
El Ministerio de Educación y la televisión cubana ofrecen cotidianamente teleclases en los diversos niveles de enseñanza, e incluso orientaciones para los niños de preescolar dos veces por semana, a solicitud de los padres.
Numerosos artistas y promotores culturales han puesto también su espíritu creador al servicio de los pequeños, con emisiones televisivas u online y otras acciones que pueden ponerse en práctica desde la distancia.
Entre ellos figura el joven actor y titiritero de la oriental urbe oriental de Guantánamo, Yosmel López, que imparte desde la red social Facebook atractivos talleres de confección y manipulación de muñecos.
Madres con sus niños figuran en su público virtual, y después muestran en sus páginas digitales sus propias creaciones.
Desde la ciudad de Camagüey, la actriz Diana Rosa Ramos, perteneciente al Grupo Nacional de Payasos Terapéuticos de Cuba, y su pequeña hija Alma, con trajes coloridos y narices rojas, transmiten de manera didáctica, imaginativa y alegre mensajes sobre las medidas necesarias contra la peligrosa pandemia.
También por redes sociales llega a los hogares Payasos a Domicilio, idea promovida por el grupo Teatro Tuyo, que muestra materiales audiovisuales, fotografías, artículos y otros, relacionados con el arte del clown.
Para promover otra vertiente cultural, el Centro Cultural Palacio de los Torcedores, el periódico Trabajadores y el proyecto cultural Enmarcarte, han convocado un concurso infantil, La historia de mi escuela.
El certamen, que recibirá los textos mediante correo electrónico, tiene el objetivo de estimular la creatividad literaria entre los infantes que en estos momentos se encuentran recluidos en sus viviendas ante el nuevo coronavirus.
Y para la protección infantil, la sociedad insiste en diversas medidas de precaución:
1. No permitir que le den besos.
2. No permitir que toquen sus manos ya que con frecuencia los niños las llevan a la boca.
3. Pídele a las personas que laven sus manos para estar al lado de los pequeños.
4. Lavarse bien las manos antes y después de cambiar sus pañales, y antes de amamantarlos si se trata de bebés.
5. Limpia sus juguetes.
6. Proporcionar a los niños información sobre cómo protegerse.
7. Aumentar el flujo de aire y la ventilación en los locales donde permanecen más tiempo.
8. Vigilar su estado de salud.
9. Alentar a los niños a hacer preguntas y expresar sus preocupaciones.
10. Enseñarlos a toser o estornudar sobre un pañuelo de papel o sobre la flexura del codo, y procurar que no se toquen la cara, los ojos, la boca y la nariz.
11. Los familiares deben estar constantemente informados.
12. Lavar adecuadamente sus ropas y otros objetos personales.
13. Crear en ellos el hábito higiénico de lavarse constantemente las manos, en la etapa de infancia.