El XXX Festival La Huella de España concluye este viernes en La Habana, luego de cuatro días de espectáculos, conferencias, intercambios y clases magistrales que evidenciaron los estrechos e históricos lazos entre la nación ibérica y Cuba.
La gala de clausura del evento en el Anfiteatro de La Habana, acogerá escenas del ballet Carmen, interpretadas por la primera bailarina Sadaise Arencibia y el bailarín principal Anyelo Montero, ambos del Ballet Nacional de Cuba, coreografía de Alberto Alonso y música de Rodion Schedrin.
También se presentará el Pas de deux del ballet Don Quijote por la Escuela Nacional de Ballet Fernando Alonso; Combinatoria en guaguancó por la compañía Rosario Cárdenas; además de Arte y Tronío (Caracoles), interpretada por el Ballet Español de Cuba.
Como parte del espectáculo se escuchará el Coro del Conservatorio de Música Guillermo Tomás, de Guanabacoa, que ofrecerá un popurrí de canciones tradicionales de la Comunidad Autónoma de Castilla y León, región de España a la que está dedicada la cita.
En el Convento de San Agustín, espacio dedicado a la atención del adulto mayor, se impartirá la conferencia “Entre Castilla y La Habana. Aproximaciones danzarias”, a cargo del museólogo Carlos Velázquez, estudioso del tema.
Actuarán en el encuentro la Compañía Flamenca Ecos y la Agrupación de Sociedades Castellanas y Leonesas en Cuba, ejemplo de la presencia de las danzas españolas en la isla caribeña.
Presidido por la primera bailarina Viengsay Valdés, directora del Ballet Nacional de Cuba (BNC), el evento es auspiciado por el Ministerio de Cultura de la nación antillana, la Embajada de España en La Habana y la Federación de Sociedades Españolas.
En conferencia de prensa reciente para anunciar el Festival, Valdés manifestó que este constituye un homenaje a la presencia española en Cuba y recuerda las raíces de la nación antillana.
Expresó que el encuentro celebra también los 75 años de fundación de la compañía con el rescate de piezas antológicas de su amplio repertorio y que han sido presentadas por estos días como Bodas de Sangre, Carmen y Don Quijote.
Destacó la participación de la Fundación y la Compañía Antonio Gades que trabajó con mucha rigurosidad en los detalles de la puesta del ballet Bodas de Sangre, que unió en escena a bailarines cubanos y españoles.
Por su parte, el embajador de España en La Habana, Ángel Martín Peccis, agradeció a las autoridades de Cuba por haber mantenido el Festival por más de 30 años.
El diplomático significó la relevancia de los lazos entre ambos países más allá de posibles diferencias. En tal sentido, comentó que la nación antillana es una morada de hermanos, de una historia compartida.
Nacido en 1989 como proyecto cultural del entonces cónsul general de España en Cuba Juan José Santos Aguado, y de Alicia Alonso, prima ballerina assoluta y directora general del BNC, el Festival ha permitido estrechar los vínculos culturales entre ambas naciones durante décadas.(Con información de PL)