Camagüey celebra el tradicional San Juan

Entre las fiestas tradicionales cubanas más auténticas se encuentra el San Juan de la oriental ciudad de Camagüey, cuyos habitantes comienzan cada 24 de junio alegres y variadas celebraciones que atraen a numerosos visitantes.

Desfiles de carrozas, comparsas, congas, muñecones, coches, bicicletas… áreas de festejos con populares agrupaciones de música bailable, nacionales y locales, forman parte de las propuestas de estas jornadas que, como en tiempos pasados, concluyen el día 29 con un singular entierro de San Pedro.

Y en la mañana del domingo 30 los niños disfrutarán de un carnaval infantil, que da comienzo a la programación recreativa del verano.

Los adornos que engalan la urbe evidencian que comenzó el San Juan, que en esta ocasión también celebra el 505 cumpleaños de la originalmente llamada Villa de Santa María del Puerto del Príncipe.

Entre las costumbres de los camagüeyanos en estos días está la preparación en calles y barrios del cubanísimo ajiaco, sopón con variedad de ingredientes, que refleja la propia nacionalidad del país, aunque también se pueden degustar otras ofertas gastronómicas en diversos establecimientos.

Las memorias de esta fiesta popular en el territorio fundamentalmente agrícola y ganadero datan del siglo XVIII, cuando al final del período de laboreo se llevaban a la urbe pieles y ganado para la venta y la época se convertía en una feria con carreras de caballos, disfraces, paseos, bailes y fiestas.

Cuentan cronistas que bromas de mal gusto contra figuras principales de la villa al amparo de las máscaras motivaron la suspensión de las festividades entre 1818 y 1834.

Cuando se restituyeron en 1835, las autoridades coloniales fijaron los términos de moderación de los festejos mediante un Bando, cuya lectura cada año daba paso a la celebración.

Desde la sede de la Asamblea Municipal del Poder Popular, antiguo Ayuntamiento, se da lectura actualmente al Bando que inicia el San Juan, celebraciones que han ido pasando de generación en generación, adaptándose a la modernidad, pero sin perder su esencia.

(junio 2019)

 

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